29.9.09

Oropel para oropelista




Mirar en tus ojos babas de libros frescos,
las bellas melodías que se asoman en tus párpados,
las blancas caricias que esperan las lluvias de la memoria.

Mientras te abrís lentamente a la eternidad,
sin detenerte en la calle del recuerdo perdido,
y más acá tus manos hablan de despedir al barco
para permanecer silenciosamente en las piernas-olas
(el tiempo en que nada se habla tan sólo canta).

Y reírnos de los sueños a susurros lentos,
casi sentir la plenitud de un vacío acompañado a viento,
imaginándonos en un enero algodón,
agigantándonos los ojos con el albor del sol,
la voz sensible en nuestros labios tejidos
a emoción de árbol y febril encuentro de bostezos
(pausados).



Peperina en trance.

5 comentarios:

  1. las lluvias de la memoria.
    encuentro de bostezos pausados.
    alejandro
    pizarnik
    janis
    peperina en trance
    y reírnos de los sueños a susurros lentos.

    oropéltica sos vos, representas a la verdadera lectora de prosas oropelianas.

    te quiero mucho!

    ResponderBorrar
  2. Linda entrada amiga. Precioso poema.

    Un besito.

    Hasta pronto

    ResponderBorrar
  3. Hola! Agradable sitio has creado aqui... me gusta...comparto...
    Gracias por visitarme... here we are, saludete rockero!

    ResponderBorrar
  4. asi como cada flor se marchita, y cada juventud cede a la vejez, así cada peldaño florece de la vida, florece tambien cada sabiduría y cada virtud a su debido tiempo y no puede durar e ternamente. a cada llamado de la vida debe el corazón estar dispuesto a despedirse y comenzar de nuevo, para ofrendarse valiente y sin lamento em otros círculos mas nuevos. y en el interior de cada comienzo un encanto habita que nos ampara y a continuar la vida ayuda.
    ¡ entonces, corazón, despídete y la salud recobra!

    ResponderBorrar
  5. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderBorrar